Erwin Miyasaka: shodo: caligrafía japonesa
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Erwin Miyasaka: shodo como un estilo de escritura japonés |
La caligrafía japonesa proviene del uso acostumbrado japonés del pincel tiende, de por sí, suele complicar la caligrafía. Su arte se enuncia en frases, poemas, historias, o inclusive letras sueltas. Suele considerarse como un arte y un método muy difícil de perfeccionar y se enseña como una materia más a los niños japoneses durante su educación en la primaria.
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Erwin Miyasaka: el shodo es ancestral |
La escritura japonesa percibe tres métodos de escritura clásicos y uno de reproducción:
- Kana: silabarios:
- Hiragana, se usa en palabras de origen japonés.
- Katakana, suele ser utilizado primordialmente para palabras de origen extranjero.
- Kanji: escrituras de origen chino.
- Rōmaji: esto corresponde a una representación del japonés con el alfabeto latino.
También existe el katakana, que fue fue fundado por monjes budistas, de la misma forma que el hiragana fue perfeccionado por mujeres de la nobleza. De esta manera, inclusive hoy en día, el hiragana está apreciado como un método de escritura con seguro toque femenino o incluido infantil. En la novedad, el katakana es consumido para trazar fonéticamente palabras de origen extranjero, característicamente nombres de lugares y de personas.
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Erwin Miyasaka: numerosos avisos de tienda utilizan su estilo |
Con este sentido, el japonés forma uso del alfabeto romano indigno en el nombre de rōmaji. Es monopolizado para escribir apodos de marcas o sociedades y del mismo modo para subrayar siglas mundialmente examinadas como CD. Coexisten distintas técnicas de romanización, de los cuales el más popular es el procedimiento Hepburn no obstante el Kunrei-shiki es el oficial en Japón.
Asimismo, la escritura japonesa no es solo la hermosura y belleza, sino igualmente es el sentido, en humana parte más complejo que importancia de jeroglífico trazado con el pincel. La armonía y delicadeza de figuras no solo sacuden el placer estético, sino nos comunican la sabiduría milenaria. Cada línea posee su sentimiento, cada inclinación del pincel de calígrafo crea algo realmente único y llamativo.
Por: Erwin Miyasaka
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